Pesar...



Todos tenemos alguna vez un pesar enorme. Cada uno lo encaja a su manera. No solo sentimos pesar por la muerte, también por la vida, por la perdida, por el cambio.
Cuando nos preguntamos por qué a veces todo es un asco, por qué duele tanto, debemos recordar que todo puede cambiar en un instante. Cuando te duele tanto que no puedes respirar, así sobrevives.
Recordando el día en que sin saber cómo y aunque parezca imposible no te sentías así, no te dolerá tanto. El pesar le llega a cada uno a su hora, a su manera.
Y lo mejor que podemos hacer, lo mejor que cualquiera puede hacer, es ser sincero. Lo peor del pesar es que no puedes controlarlo. Lo mejor que podemos hacer es permitirnos sentirlo cuando llega y liberarnos de él cuando podamos.
Lo peor es que cuando crees que lo has superado vuelve otra vez. Y cada vez te deja sin aliento. Hay cinco fases en el duelo.
Se manifiesta de forma diferente en cada uno pero siempre hay cinco:

Negación
Ira
Negociación
Depresión
Aceptación
.



No hay comentarios: